Proceso de fabricación más artesanal
Los helados artesanales se están convirtiendo en una tendencia gastronómica cada vez más popular entre los amantes de los postres y los productos de calidad. La demanda de helados con menos aditivos y sabores naturales ha impulsado a numerosas heladerías a apostar por un proceso de fabricación más artesanal y comprometido con la calidad de los ingredientes.
La industria alimentaria ha sido criticada en múltiples ocasiones por el uso excesivo de aditivos y conservantes en sus productos, lo que ha llevado a un creciente interés por consumir alimentos más saludables y naturales. En este contexto, los helados artesanales se presentan como una opción deliciosa y fresca, elaborada con ingredientes de primera calidad y libres de aditivos químicos.
La elaboración de helados artesanales requiere de un proceso más cuidadoso y detallado, donde se prioriza la calidad de los ingredientes por encima de la velocidad de producción. En lugar de utilizar mezclas artificiales, colorantes y conservantes, las heladerías artesanales optamos por ingredientes naturales como frutas frescas, leche de calidad y azúcares naturales.
Mayor variedad de sabores y combinaciones
Además, los helados artesanales suelen ofrecer una mayor variedad de sabores y combinaciones, permitiendo a los consumidores disfrutar de experiencias culinarias únicas y sorprendentes. Desde helados tradicionales como el chocolate o la vainilla, hasta sabores más innovadores, como hacemos en Golat Helados, como el aceite de oliva virgen mallorquín o el tomate de ramallet con albahaca.
En Golat estamos innovando constantemente. Algunos de nuestros sabores especiales para chefs y profesionales del sector son: aceite de oliva virgen mallorquín, mostaza antigüa, ajo blanco, sorbete de albahaca, sorbete de Negroni, sorbete de Apperol Striz, helado de té matcha, helado de sésamo negro, de boniato asado, de tomate de ramallet + albahaca, sorbete de Amareto, de cerveza IPA, de vainilla, pistacho, chocolate, almendra, avellana, coco…
Es un compromiso con la calidad de los ingredientes, la ausencia de aditivos químicos… En un obrador de helados artesanales es donde se consigue, con mucha pasión y dedicación, una amplia variedad de sabores que los convierten en una opción ideal para aquellos que buscan disfrutar y ofrecer algo más.